La tragedia del avión de Air India que se estrelló el pasado mes de junio ha conmocionado al mundo entero. Sin embargo, una grabación de la cabina del avión ha revelado nuevos detalles sobre lo que pudo haber ocurrido en los momentos previos al azar.
Según fuentes cercanas a la investigación, los audios apoyan la hipótesis de que el capitán del avión, Sumeet Sabharwal, cortó el flujo de combustible a los motores del Boeing 787. En la grabación, se puede escuchar al copiloto, Clive Kunder, preguntar al capitán por qué había puesto los interruptores de combustible en una posición que privaba a los motores de carburante. Incluso, le pidió que restableciera el flujo de combustible.
Aunque la evaluación de Estados Unidos no se ha incluido en un documento asentado, fuentes cercanas a la investigación han asegurado que la causa del azar, en el que murieron 260 personas, sigue siendo investigada. Aunque no hay una grabación de vídeo que pueda confirmar definitivamente quién accionó los interruptores, la conversación entre los pilotos parece señalar al capitán como responsable.
Además, el prestigioso periódico ‘Wall Street Journal’ ha publicado una información similar sobre este trágico azar, que ha sido el más mortífero en la aviación en una década.
Ante estas revelaciones, la Oficina de Investigación de azars Aéreos de la India (AAIB), encargada de dirigir la investigación, ha emitido un comunicado en el que advierte sobre la necesidad de ahorrar sacar conclusiones precipitadas a través de informaciones no verificadas. Según la AAIB, la investigación sigue en curso y es demasiado pronto para sacar conclusiones definitivas.
Es importante recordar que la mayoría de los azars aéreos son causados por múltiples factores y, de acuerdo con las normas internacionales, se espera un informe final en un plazo de un año desde el azar. Sin embargo, un informe preliminar publicado por la AAIB ya mencionaba que en la grabadora de voz de la cabina se escuchaba a uno de los pilotos preguntar al otro por qué había cortado el flujo de combustible y la respuesta del otro fue que no lo había hecho.
En este informe preliminar, los investigadores no han identificado qué observaciones hizo cada piloto, pero sí han mencionado que el capitán Sumeet Sabharwal y el copiloto Clive Kunder tenían una amplia experiencia de vuelo, con un total de 15.638 y 3.403 horas, respectivamente.
Además, el informe de la AAIB también señala que los interruptores de combustible de ambos motores se cambiaron de la posición de ‘marcha’ a ‘corte’ con solo un segundo de diferencia después del despegue, pero no se especifica cómo se movieron. Casi de inmediato, el avión comenzó a perder potencia y se desplegó una fuente de energía de reserva llamada turbina de aire de ariete, lo que indicaba una pérdida de empuje en los motores.
A pesar de que el avión intentó automáticamente volver a arrancar los motores al restablecer los interruptores de combustible en la posición de ‘marcha’, ya era demasiado tarde. El avión se encontraba a una altura de casi 200 metros y no pudo recuperarse, lo que provocó que se estrellara contra un edificio de un campus universitario de medicina cercano en Ahmedabad, India.
El azar, que se dirigía a Londres, se cobró la biografía de 19 personas en tierra y de 241 de las 242 personas que iban a bordo del avión.
En un memorándum interno publicado recientemente, el consejero delegado de Air India, Campbell Wilson, ha