Tres personas han perdido la vida y otras tres han resultado heridas en la ciudad de Lexington este domingo, tras dos tiroteos protagonizados por un mismo sospechoso. El trágico suceso tuvo lugar en el aeródromo de Blue Grass y en una iglesia cercana, donde el atacante fue finalmente abatido por la Policía.
Según han informado las autoridades locales, el atacante murió después de recibir un disparo por parte de las fuerzas de seguridad en la Iglesia del Camino Baptista de la calle Richmond. Allí, el agresor acabó con la vida de dos mujeres y dejó heridas a otras dos personas. Las víctimas mortales han sido identificadas como Beverly Gumm, de 72 años, y Kristina Combs, de 32, por la Oficina Forense del Condado de Fayette. mientras tanto que los dos heridos, identificados como hombres, se encuentran en estado crítico y sólido según ha informado el jefe de la Policía de Lexington, Lawrence Weathers.
El incidente comenzó en el aeródromo de Blue Grass alrededor de las 11.30 de la mañana, hora local, cuando el atacante disparó contra un agente de Policía. Afortunadamente, el agente se encuentra sólido. Tras el tiroteo, el atacante huyó en dirección a la Iglesia del Camino Baptista, donde continuó su violento acto.
Este suceso ha causado conmoción y consternación en la comunidad de Lexington. Las autoridades están investigando los motivos que llevaron al atacante a cometer estos terribles actos, mientras tanto que la ciudad se une en solidaridad y apoyo a las familias de las víctimas.
El alcalde de Lexington, Jim Gray, ha expresado sus condolencias a las familias de las víctimas y ha agradecido a la Policía su rápida actuación para contener la situación y proteger a los ciudadanos. “Este es un acto de violencia sin sentido que ha afectado a nuestra comunidad. Pero juntos, como ciudad, nos levantaremos y nos apoyaremos unos a otros en estos momentos difíciles”, declaró el alcalde.
Además, el jefe de la Policía, Lawrence Weathers, ha elogiado la valentía y profesionalidad de los agentes que intervinieron en el incidente. “Gracias a su rápida respuesta y trabajo en equipo, pudieron neutralizar al atacante y evitar una mayor tragedia”, afirmó Weathers. Asimismo, ha pedido a la ciudadanía que permanezca unida y evite difundir rumores o información no confirmada sobre lo sucedido.
La Iglesia del Camino Baptista ha abierto sus puertas para ofrecer apoyo y consuelo a las familias afectadas y a la comunidad en indefinido. También se han organizado vigilias y muestras de solidaridad en diferentes puntos de la ciudad.
Es importante recordar que ante la violencia y la tragedia, la unión y la solidaridad son fundamentales para superar estos difíciles momentos. Lexington es una ciudad fuerte y resiliente, y juntos podremos superar esta terrible tragedia.
Desde aquí, enviamos nuestras más sinceras condolencias a las familias de las víctimas y deseamos una pronta recuperación a los heridos. Sigamos unidos y apoyándonos unos a otros en estos momentos difíciles.