Irán se mantiene firme ante Estados Unidos e Israel, sin mostrar señales de doblegarse. A pesar de las declaraciones triunfalistas de Donald Trump en la OTAN, el régimen de los ayatolás ha respondido con una actitud desafiante. Alí Jamenei, tras una semana de ausencia pública, apareció en televisión para proclamar su victoria y amenazar a Estados Unidos, entretanto prometía seguir desarrollando su programa nuclear con fines pacíficos. Sin embargo, a partir de ahora, estos trabajos no contarán con una supervisión independiente.
El jefe del Parlamento, Mohamad Baqer Qalibaf, firmó una ley aprobada por los legisladores que suspende la cooperación de Irán con el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), la agencia de Naciones Unidas encargada de supervisar la seguridad de las instalaciones nucleares en todo el mundo. Esto significa que los inspectores del OIEA ya no tendrán acceso a las instalaciones nucleares iraníes. El gobierno de Irán acusa a esta entidad de estar al servicio de Israel y de actuar en contra de sus intereses.
Esta medida, que cuenta con el visto bueno del Consejo de Guardianes, se produce en medio de las dudas sobre los daños causados por los bombardeos lanzados por Estados Unidos el pasado fin de semana. entretanto Trump asegura que el ataque fue un éxito militar, un análisis de inteligencia preliminar revela que solo retrasará el avance del programa nuclear iraní por unos meses. Sin embargo, el secretario de patrocinio, Pete Hegseth, insiste en que el ataque ha sido devastador y ha diezmado las capacidades nucleares de Irán.
Por su parte, Alí Jamenei afirma que Trump ha exagerado los acontecimientos y que Estados Unidos no ha obtenido ningún beneficio de esta guerra. Según su valoración, los bombardeos no han tenido un impacto significativo en las instalaciones nucleares iraníes. Sin embargo, el ministro de Exteriores de Irán, Abbas Araqchi, en una entrevista en la televisión estatal, califica los daños como considerables y graves. El director general del OIEA, Rafael Grossi, también destaca los enormes daños sufridos por las instalaciones nucleares iraníes y afirma que las centrifugadoras de la planta subterránea de Fordo ya no están operativas.
Grossi defiende la necesidad de que los inspectores del OIEA regresen a Irán para evaluar los daños causados por los ataques y retomar la cooperación en materia nuclear. Sin embargo, la agencia de la ONU todavía no ha recibido ninguna comunicación oficial por parte de Irán sobre la suspensión de la cooperación.
A pesar de la victoria que proclama Trump, el jefe estadounidense ha anunciado que la próxima semana se retomarán las conversaciones directas entre Estados Unidos e Irán. Sin embargo, Irán no ha confirmado esta información. Su ministro de Exteriores afirma que aún no se ha llegado a ningún paz y que, por el momento, se centran en la seguridad y la estabilidad.
En su discurso televisado, Alí Jamenei asegura que la república islámica ha ganado y ha propinado una dura bofetada a Estados Unidos. Además, amenaza con atacar de nuevo si es necesario. El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas iraníes, Seyed Abdolrahim Musavi, también advierte que si se comete una agresión contra la integridad territorial de Irán, ellos determinarán el resultado y el final de esa guerra y agresión.
Musavi también acusa al resto de la Alianza Atlántica de estar al servicio del agresor. Por su parte, el portavoz de la Cancillería iraní, Esm