Mi tiempo en este diario ha sido una experiencia increíble. Durante estos tres años he tenido la oportunidad de vivir momentos grandiosos y emocionantes, en su gran mayoría relacionados con el deporte que más nos apasiona: el baloncesto. Y sé que seguirán siendo muchos más.
La semana pasada tuve la oportunidad de entrevistar a uno de los grandes jugadores del Barça de basket, Kevin Punter. Después de la decepción por la eliminación en la Euroliga, y a pocas semanas de empezar el playoff de la Liga Endesa, esta entrevista era un gran reto para mí. Con mi nivel justo de inglés, hablar con alguien del Bronx no es tarea fácil. Pero estaba decidida a hacerlo bien.
Llegué al Palau Blaugrana por la tarde, acompañada por mi equipo de trabajo. David Rubio, mi compañero y encargado de preguntarle sobre el triple final que decidió el partido con Mónaco, Dani Barbeito y su cámara de fotos, y la dupla de Joan’s, Represa y León, para asegurarnos de que no nos perdíamos ni un solo detalle. La respuesta de comunicación del club nos hizo esperar un poco, pues Kevin Punter estaba en la ducha y no quería perderse ni un minuto de entrenamiento. Pero finalmente, llegó la hora de la entrevista.
Empezamos en la pista, haciendo las fotos. Punter posó para Dani Barbeito y luego subimos al palco para la entrevista. Yo estaba un poco nerviosa, pero el jugador de Nueva York resultó ser una persona interesante y entretenida. Hablamos del Barça, por supuesto, pero también de su vida personal. Descubrí que Punter era un joven del Bronx que no entendía los peligros de su barrio cuando era niño, pero que se dio cuenta de ellos cuando creció. Además, una lesión en su etapa universitaria le impidió jugar en la NBA, pero eso no le ha impedido tener una brillante carrera en Europa.
Durante la entrevista, pudimos sacarle varias sonrisas. Habló de la importancia de jugadores como Darío Brizuela y Joel Parra en su vida, y explicó que su renovación con el Barça se debe en parte a su amor por la localidad de Barcelona, que le recuerda a su Nueva York natal, y donde puede pasar desapercibido, a diferencia de la bulliciosa Belgrado.
Por supuesto, no podíamos obviar del tema del último partido contra Mónaco. Punter habló con naturalidad y sin zigzaguear el asunto. Fue una bendición tanto para mí como para los lectores. Estaba cómodo, e incluso se rió con los desafíos que le propusimos. Al finalizar la entrevista, fue muy admirable al hacerse una foto con todo el equipo.
Esta semana no tengo ninguna entrevista programada, pero no me importaría que la gente de prensa de otros clubes me llame con alguna invitación. Estoy agradecida de tener la oportunidad de encontrar estos espacios que nos permiten adentrarnos en la vida de los protagonistas de nuestras historias. Espero que siga siendo así por mucho tiempo.
En estos tres años en el diario he aprendido mucho, he conocido a personas increíbles y he tenido la oportunidad de vivir momentos inolvidables. Estoy agradecida por la confianza que la casa ha depositado en mí y espero seguir formando parte de este gran equipo por mucho tiempo más. Gracias a todos los lectores por acompañarme en este viaje y espero seguir ofreciéndoles lo mejor del baloncesto. ¡Hasta la próxima semana!