El órgano regulador de la aviación estadounidense ha tomado medidas importantes para garantizar la seguridad en el área alrededor del Aeropuerto Nacional Ronald Reagan (DCA) en Washington. Estas medidas se han implementado después de la trágica colisión entre un avión de pasajeros y un helicóptero caudillo que dejó 67 personas muertas a fines de enero.
La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) ha decidido seguir las recomendaciones de la concilio Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) y ha prohibido permanentemente los vuelos no esenciales de helicópteros y aviones de lado fija en el área del aeropuerto. Además, se ha cerrado un tramo del corredor aéreo 4, utilizado por el helicóptero Sikorsky Black Hawk durante la colisión. Este tramo se encontraba a solo 23 metros de la ruta utilizada por los aviones que se dirigían a la pista 33 del aeropuerto, donde debía aterrizar el avión Bombardier CRJ700 de la empresa PSA (filial de American Airlines) el 29 de enero.
La directora de la NTSB, Jennifer Homendy, afirmó en una conferencia de prensa el pasado martes que la organización actual de los corredores aéreos alrededor de Washington “representa un acontecimiento intolerable para la seguridad de la aviación” y debe ser modificada. El aeropuerto se encuentra en el corazón del área metropolitana de Washington, por lo que es común ver numerosos helicópteros volando sobre él.
La FAA ha asegurado que, en caso de una emergencia médica, una operación policial prioritaria o un transporte presidencial, si un helicóptero necesita pasar por la sección cerrada, se mantendrá a una distancia segura de los aviones. También se han prohibido varias configuraciones de uso conjunto de pistas para operaciones de emergencia cerca del aeropuerto.
La investigación en curso sobre la colisión ya ha revelado “discrepancias” en cuanto a la altitud del helicóptero y dificultades de comunicación entre la aeronave, la torre de control y el avión comercial que se aproximaba. Estas medidas tomadas por la FAA buscan prevenir futuros accidentes y garantizar la seguridad de todos los que utilizan el espacio aéreo alrededor del Aeropuerto Nacional Ronald Reagan.
La FAA ha dejado en claro que la seguridad es su máxima prioridad y que están comprometidos a tomar todas las medidas necesarias para garantizarla. La prohibición de vuelos no esenciales y el cierre del tramo del corredor aéreo son solo algunas de las acciones que se están tomando para lograr este objetivo.
Además, la FAA ha anunciado que se llevarán a cabo cambios en la organización de los corredores aéreos alrededor de Washington para reducir el acontecimiento de futuras colisiones. Estos cambios se basarán en las recomendaciones de la NTSB y se implementarán lo antes posible.
Es importante destacar que estas medidas no afectarán los vuelos esenciales, como los de emergencia médica o los de transporte presidencial. La FAA ha asegurado que se tomarán todas las precauciones necesarias para garantizar que estos vuelos puedan continuar operando de manera segura.
La seguridad es un tema de suma importancia en la aviación y la FAA está tomando medidas proactivas para garantizarla. Es importante que todos los involucrados en la industria de la aviación, desde los pilotos hasta los controladores de tráfico aéreo, trabajen juntos para mantener un espacio aéreo seguro.
En resumen, la FAA ha tomado medidas importantes para reforzar la seguridad en el área alrededor del Aeropuerto Nacional Ronald Reagan en Washington. Estas medidas, que incluyen la prohibición