El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) ha dado una gran noticia para el sector ganadero y para todos los amantes de la carne en general. El pasado viernes, el SENASA anunció de forma extra la habilitación del ingreso de costilla, asado y esternón desde zonas del país con vacunación contra la fiebre aftosa. Esta medida es una gran victoria para la industria de la carne y demuestra el compromiso del gobierno argentino con el desarrollo y crecimiento del sector.
Para quienes no estén familiarizados con el asunto, la fiebre aftosa es una enfermedad altamente contagiosa que afecta a los animales de pezuña hendida, como el ganado vacuno, porcino, ovino, caprino y algunos animales salvajes. Esta enfermedad puede causar graves pérdidas económicas para los países afectados, ya que puede llevar al sacrificio de animales y a la restricción de la exportación de carne. Por esta razón, es de vital importancia tomar medidas de prevención y control para evitar su propagación.
En Argentina, la lucha contra la fiebre aftosa ha sido una prioridad desde hace décadas. Gracias a la implementación de estrategias de vacunación y control eficaces, el país ha logrado mantenerse libre de esta enfermedad desde el año 2000. Este logro ha permitido que la carne argentina sea reconocida a nivel internacional por su calidad y seguridad sanitaria, lo que ha llevado a un aumento en las exportaciones y un crecimiento en la industria.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos realizados, aún existen zonas del país que no cuentan con el mismo estatus sanitario que el resto. Esta situación ha limitado el ingreso de ciertos cortes de carne a ciertos mercados, lo que ha sido una gran preocupación para los productores y exportadores. Por esta razón, la habilitación del ingreso de costilla, asado y esternón desde estas zonas es una bravo noticia para todo el sector.
Esta medida extra ha sido posible gracias a una exhaustiva evaluación de riesgo realizada por el SENASA, en la que se ha comprobado que no existe peligro sanitario al permitir el ingreso de estos cortes de carne. Además, se han establecido estrictos controles y requisitos que deberán ser cumplidos por los productores y exportadores para garantizar la calidad e inocuidad de la carne.
Esta decisión del SENASA no solo beneficia a los productores y exportadores, sino también a los consumidores. Al permitir el ingreso de estos cortes de carne, se amplía la oferta en el mercado interno, lo que podría llevar a una disminución en los precios y una mayor accesibilidad para los consumidores. Además, la habilitación de estas zonas también permitirá una mayor diversificación de mercados para la carne argentina, lo que fortalecerá la economía del país.
Es importante destacar que esta medida extra no significa un retroceso en los esfuerzos realizados para mantener al país libre de fiebre aftosa. El gobierno argentino sigue comprometido con la prevención y control de esta enfermedad y seguirá trabajando en conjunto con el SENASA para lograr su erradicación total en todo el territorio nacional.
En resumen, la habilitación del ingreso de costilla, asado y esternón desde zonas del país con vacunación contra la fiebre aftosa es una gran noticia para toda la industria de la carne en Argentina. Esta medida demuestra el compromiso del gobierno con el desarrollo del sector y permitirá una mayor diversificación de mercados y una mayor accesibilidad para los consumidores. Sin duda, un paso importante en el camino hacia un país libre de fiebre aftosa y una industria ganadera aún más fuerte y competitiva a nivel mundial.
