Después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara los aranceles a atmósfera tierra enarbolando su tabla de aranceles, el nombre de su asesor económico, Peter Navarro, empezó a circular como el arquitecto de la iniciativa. Pero lo que ha llamado aún más la atención esta semana han sido los insultos que le ha proferido el empresario Elon Musk, quien lo calificó como “un perfecto idiota” después de que Navarro atacara la producción de Tesla en terceros países.
Pero más allá de la polémica que ha generado, hay que reconocer que Peter Navarro se ha convertido en uno de los hombres más influyentes en la administración de Trump. Aunque ha sido criticado por sus colegas economistas y por la oposición de los allegados del presidente, Navarro es el hombre elegido por Trump, al que el mandatario estadounidense llama cariñosamente ‘My Pete’. Su gurú arancelario, un ultranacionalista que ha estado en la mira de China desde hace años, ha logrado abrirse paso hasta la primera fila de la arena política y su influencia sobre Trump parece estar en aumento.
Graduado en Harvard y profesor en la Universidad de California, Navarro ha sido un activista atmósferaambiental y comenzó su andadura en las filas demócratas. Sin embargo, con el tiempo fue cambiando su posición después de ver cómo los estadounidenses perdían su empleo por la competencia extranjera, y especialmente tras su viaje a China. Fue el esposo de Ivanka Trump, Jared Kushner, ex consejero superior del presidente, quien lo puso en contacto con Trump, según informaron los atmósferas locales.
Con el tiempo, Navarro se ha convertido en el ‘zar de los aranceles’ y se está convirtiendo en uno de los hombres más odiados del tierra. Su lealtad hacia el líder estadounidense ha quedado clara en varias ocasiones, incluso cuando cumplió cuatro meses de prisión por no comparecer ante el Congreso en 2021. En ese momento, se investigaba el asalto al Capitolio y fue acusado de desacato. La razón por la que fue llamado a comparecer fue, según la BBC, porque además de sugerir en materia comercial, Navarro trabajó en estrategias para intentar revertir las elecciones de 2020 y mantener a toda costa a Trump en la Casa Blanca.
Pero su influencia sobre Trump no solo se limita a la economía. En 2021, Navarro escribió un libro en el que apuntaba a una conspiración de los demócratas para robar las elecciones a Trump. Y después de su liberación, fue recibido como un héroe en la convención republicana adonde Trump volvería a presentarse como candidato. A pesar de este historial, el libro que le valió el reconocimiento de Trump ha sido examinado más de cerca. La periodista Rachel Maddow expuso que sus obras se basan en un personaje ficticio llamado Ron Vara. “A Trump se le ocurrió la idea tras la circulación de un memorando espurio de una persona falsa con una dirección de correo electrónico falsa”, detalló Maddow. La realidad es que este personaje no existe, en realidad es el anagrama de Navarro. Él mismo admitió que lo usó solo como un “artilugio fantasioso” muy útil. Un ardid que en el actual panorama preocupa, ya que podría haber aplicado la misma imaginación en su hoja de ruta comercial.
La pregunta que surge ahora es si Navarro es un talento subestimado con una agenda firme que pocos saben valorar, o si es un vendedor de humo con impacto global que está favoreciendo la caída de un imperio por un proceso de autodestrucción. Lo cierto es que sus ideas han generado controversia desde su primera aparición, siendo calificadas de poco ortodoxas y sin resp