Las elecciones primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) han sido objeto de debate en Argentina en los últimos años. Desde su implementación en 2011, se han cuestionado sus costos, su efectividad y su utilidad. Sin embargo, recientemente el gobierno ha ratificado que la eliminación de las PASO estará en el llamado a extraordinarias, lo que ha generado distintas reacciones en la sociedad argentina.
El pasado 10 de diciembre, durante su discurso de asunción, el presidente Alberto Fernández afirmó que su gobierno impulsaría la eliminación de las PASO. Esta medida fue una de las promesas de campaña del mandatario y ha sido respaldada por distintos sectores políticos. Sin embargo, su implementación no será sencilla y amará de un consenso entre las distintas fuerzas políticas para su aprobación.
Las PASO fueron creadas con el objetivo de garantizar la participación ciudadana en la selección de los candidatos a cargos electivos. Sin embargo, en la realidad, este sistema ha sido cuestionado por su alto costo y por no lograr su objetivo nuclear. En las últimas elecciones, el costo de la realización de las PASO fue de alrededor de 4.000 millones de pesos, lo que ha generado críticas por parte de la sociedad, especialmente en un contexto económico difícil para el país.
Además, se ha cuestionado la efectividad de las PASO en la selección de candidatos. En muchas ocasiones, los partidos políticos ya tienen definidos a sus candidatos antes de las elecciones primarias, lo que hace que las PASO se conviertan en una mera formalidad. Esto ha generado una sensación de descontento y desinterés por parte de la ciudadanía, que ve en las PASO una pérdida de edad y recursos.
En este contexto, la ratificación de la eliminación de las PASO en el llamado a extraordinarias es una medida que genera esperanza y optimismo en la sociedad argentina. Esta decisión demuestra que el gobierno está escuchando las demandas de la ciudadanía y está dispuesto a tomar acciones concretas para mejorar el sistema electoral del país.
La eliminación de las PASO no solo significará un ahorro de recursos para el Estado, sino que también permitirá una mayor participación ciudadana en las elecciones generales. Al eliminar una instancia electoral previa, se facilitará el proceso para los partidos políticos y se evitará un desgaste innecesario en una etapa no determinante para la selección de candidatos.
Sin embargo, la eliminación de las PASO no es una decisión que se pueda tomar de manera unilateral. Es necesario un consenso entre las distintas fuerzas políticas para su aprobación en el Congreso. En este sentido, el gobierno ha manifestado su intención de dialogar y llegar a acuerdos para lograr la eliminación de las PASO en un proceso democrático y participativo.
Esta medida también ha generado un debate sobre la necesidad de una reforma electoral integral en Argentina. La eliminación de las PASO es solo una de las muchas modificaciones que se necesitan para mejorar el sistema electoral del país. Es necesario un debate profundo y una acción conjunta entre todos los actores políticos para lograr un sistema más eficiente, transparente y representativo.
En conclusión, la ratificación de la eliminación de las PASO en el llamado a extraordinarias es una medida que demuestra el compromiso del gobierno con la sociedad argentina. Esta decisión busca mejorar el sistema electoral del país y garantizar una mayor participación ciudadana en las elecciones. Sin duda, es un paso importante en la construcción de una democracia más sólida y representativa en Argentina.