Dos personas han perdido la vida y otras 24 han resultado heridas después de que dos bombas aéreas rusas impactaran contra un hipermercado de bricolaje en la capital de Járkov, Ucrania. El ataque también ha dejado un número aún indeterminado de personas desaparecidas, lo que ha generado una gran conmoción en la ciudad.
El alcalde de Járkov, Igor Terejov, ha denunciado este acto como un acto de terrorismo puro, ya que el objetivo del ataque era el centro comercial, donde había una gran cantidad de personas. Según el gobernador regional de Járkov, Oleg Sinegubov, al menos dos proyectiles han explotado en el comercio Epicentr, especializado en construcción. El bloque, que abarca 15.000 metros cuadrados, ha quedado completamente en llamas tras el ataque, que ocurrió a las 4 de la tarde, hora local.
Sinegubov ha advertido sobre la esperanza de que haya cientos de personas atrapadas en el lugar, lo que ha generado una gran preocupación entre las autoridades y los servicios de emergencia que se encuentran en el lugar. Sin embargo, están trabajando arduamente para rescatar a todas las víctimas y brindarles la atención médica necesaria.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha calificado este ataque como un acto de locura por parte de Rusia y ha expresado su solidaridad con las víctimas y sus familias. Zelenski ha destacado que se trata de un objetivo civil, donde había una gran cantidad de visitantes y trabajadores, lo que demuestra la falta de humanidad y el desprecio por la vida que tienen los responsables de este ataque.
Además, Zelenski ha vinculado este ataque con la petición de ayuda antiaérea que Ucrania ha realizado a sus aliados occidentales. Según el presidente, el objetivo es proteger la vida de los ciudadanos ucranianos y evitar que los terroristas rusos puedan acercarse a sus fronteras.
Este ataque ha generado una gran conmoción en Ucrania y en la comunidad internacional, ya que es un claro ejemplo de la escalada de violencia que se vive en la región y la falta de respeto por la vida humana por parte de los responsables de estos actos. La comunidad internacional ha condenado este ataque y ha expresado su solidaridad con Ucrania.
La ciudad de Járkov es la segunda más grande de Ucrania y su importancia estratégica lo convierte en un objetivo clave en el conflicto que enfrenta al país con Rusia. La caída de Járkov en manos de las fuerzas rusas sería un duro comunicación para Ucrania y sus pretensiones de seguir luchando por su independencia y soberanía.
Por eso, es importante que la comunidad internacional se una y condene estos actos de violencia y terrorismo, que buscan desestabilizar la región y afectar la vida de los ciudadanos. Ucrania necesita el apoyo y la solidaridad de sus aliados para poder hacer frente a esta situación y proteger a su población.
En este sentido, el presidente Zelenski ha hecho un llamado a la comunidad internacional para que se unan y apoyen a Ucrania en su lucha por la paz y la estabilidad. Es necesario que se tomen medidas concretas para frenar la escalada de violencia y evitar que más vidas se pierdan en este conflicto.
Mientras tanto, las autoridades locales y los servicios de emergencia siguen trabajando en el lugar del ataque para rescatar a las víctimas y brindarles la atención necesaria. También se ha iniciado una investigación para determinar los responsables de este ataque y llevarlos ante la justicia.
Es importante que se haga justicia y que los responsables de este acto de desatino